Solo hay que ir a un hospital para ver la soledad de nuestros ancianos. Soledad que no se merecen, ni olvido que no acabemos pagando nosotros mismos. Decía woody Allen, "las canas ya no se respetan, se tiñen". Y no puedo estar más de acuerdo.
Esta mañana he ido con mi padre al Hospital Germans Tries i Pujol de Badalona, Can Ruti, vamos. Y se me ha estremecido el corazón. Una sala con más de doscientas personas, el 90% mayores de 70 años, esperando para hacerse un analisis de sangre. Eso a las 9 de la mañana. Teniendo en cuenta que el hospital queda un poco, bastante, lejos del centro urbano, hay que pensar que toda esa pobre gente no ha dormido en toda la noche para levantarse a las seis de la mañana, coger el autobus de las siete para llegar allí con tiempo para el analisis. No hay derecho a que los mareen de esa manera. Hoy en día que hay ambulatorios en la mayoría de barrios y poblaciones de Cataluña, ¿cómo les hacen desplazarse hasta el hospital, para hacer tres colas diferentes y acabar en una sala donde apenas se cabía?
Yo he acompañado a mi padre, no puedo hacer menos por él, pero toda la gente que había sola me hacía sentirme muy mal. Desconcertada es poco, malhumorada, desengañada, moralmente por los suelos. Y no es por ellos, que al fin y al cabo lo que buscan es un poco de atención, que alguien les cure sus males y les atienda como apersonas. Es la soledad, el desamparo.
Cuando nosotros eramos niños, siempre tuvimos su mano para ayudarnos a caminar, nos daban de comer, nos vestían, nos duchaban y nos enseñaban a respetar a los demás. ¿Por qué ahora se ven perdidos entre una maraña burocrática sin nadie que le ayude a decirles por donde deben de ir?
Algo falla.
Definitivamente, el respeto que mostremos a nuestros mayores, será el mismo que recibiremos de nuestros hijos.
Esta mañana he ido con mi padre al Hospital Germans Tries i Pujol de Badalona, Can Ruti, vamos. Y se me ha estremecido el corazón. Una sala con más de doscientas personas, el 90% mayores de 70 años, esperando para hacerse un analisis de sangre. Eso a las 9 de la mañana. Teniendo en cuenta que el hospital queda un poco, bastante, lejos del centro urbano, hay que pensar que toda esa pobre gente no ha dormido en toda la noche para levantarse a las seis de la mañana, coger el autobus de las siete para llegar allí con tiempo para el analisis. No hay derecho a que los mareen de esa manera. Hoy en día que hay ambulatorios en la mayoría de barrios y poblaciones de Cataluña, ¿cómo les hacen desplazarse hasta el hospital, para hacer tres colas diferentes y acabar en una sala donde apenas se cabía?
Yo he acompañado a mi padre, no puedo hacer menos por él, pero toda la gente que había sola me hacía sentirme muy mal. Desconcertada es poco, malhumorada, desengañada, moralmente por los suelos. Y no es por ellos, que al fin y al cabo lo que buscan es un poco de atención, que alguien les cure sus males y les atienda como apersonas. Es la soledad, el desamparo.
Cuando nosotros eramos niños, siempre tuvimos su mano para ayudarnos a caminar, nos daban de comer, nos vestían, nos duchaban y nos enseñaban a respetar a los demás. ¿Por qué ahora se ven perdidos entre una maraña burocrática sin nadie que le ayude a decirles por donde deben de ir?
Algo falla.
Definitivamente, el respeto que mostremos a nuestros mayores, será el mismo que recibiremos de nuestros hijos.
8 comentaris:
Hola Charo.
Si te digo que te sobra la razón me quedo corto.
A mi me hacen los análisis en el Clínic, supongo que el motivo es porque son especiales. Lo importante es lo que dices de las personas mayores.
Supongo que en Can Ruti lo harán igual, pero aqui en el Clínic hay el sistema de estos rótulos luminosos que aparecen letras y números, y te dirigen a los analistas tanto de sangre como de orina.
De entrada ya te dicen que estés pendiente de aquel panel. Y te aseguro que hacen bien en decirlo, porque aquello es un continuo de saltar los números, letras y puerta.
Hay bastante gente mayor que te pide ayuda constantemente, y no me extraña. Y además es lo que dices tu. Allí se encuentran desemparados.Por lo menos el año pasado había siempre un empleado para hacer de guia, ahora ni esto.
No hay derecho.Y los horarios tambien son de 7 a 14 de la mañana.
Yo por ejemplo la semana pasada aun me acuerdo que tenia el número:
N-414- PUERTA 11
Y aun me acuerdo porque los memorizo.
Pero claro, cuando no pueda ....
Una abraçada Charo.
Emotivo relato, Charo! Como entiendo lo que cuentas... algo falla (como dices).
Es un salir a la jungla, un laberinto, caos y desorientación, muchas preguntas en mente, y un sentimiento de indefensión, y un ¿Y ahora qué?
Fallaran muchas cosas, pero seguro que la COMUNICACIÓN, es una de ellas. A muchos niveles.
Saludos!
Llevas toda la razon del mundo en todos los hospitales e ven lo ismo gente mayor sola sin acompañantes que a veces les cuesta andar es una injustia
un beso
Mas que cierto todo lo que dices, lo de hoy por ti mañanana por mi, si en algùn lugar podemos verlo claro,es en el trato que le demos a los mayores...
Excelente entrada...
Me ha impresionado tu relato Charo, si lo ha hecho es porque es real y esta realidad es muy triste, desgraciadamente ya casi nadie se preocupa de los mayores, son números que en muchas ocasiones hasta "estorban", hoy en día en que se da auténtico culto a la juventud las personas mayores ya no "pintan" nada.....terrible pero cierto y lo malo es que todos tenemos que recorrer ese camino por ello se me ocurre que los mayores deberían revelarse y unidos fomentar el culto a la ancianidad,sería un bien para todos. Saludos.charo(la otra)
Queridos Amigos, gracias por vuestras palabras. En verdad quedé muy desmoralizada por todo lo que ví ese día. Veo que somos muchos los que estamos sensibilizados y creo que se debería de hacer algo por ellos. Auqnue son las instituciones las que tienen poder para ello, creo que debemos denunciar cada vez que veamos algo injusto. La sanidad debería tratar a personas, no a números.
Un abrazo muy fuerte para todos.
Hola Charo, claro que tienes razón. Yo misma fui tratada en el hospital como un número aún siendo una operación grave, aunque no por parte de todos los sanitarios "Gracias a Dios" pero eso ya pasó. Espero y deseo que todas las personas mayores sean atendidas con respeto y cariño, ellos cuidaron una vez de nosostros como mínimo se merecen lo mismo.
Un beso!
guaaa!! me ha encantado espero que os guste el mio
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